Llegue a casa, estaba mojado, por la gran lluvia que se desato escasos minutos, en esta ciudad instantáneamente las ambulancias con sus sirenas suenan cada segundo que pasa, el viento sopla tan fuerte que cierra todo de un golpe.
Me quito la chaqueta, la dejo en el sillón y voy a mi cuarto a reflexionar,
— Hoy fue un día difícil – Me pronuncio a mí mismo.
Mi trabajo de psicología es difícil escuchar muchos pacientes que están mal en sus cinco sentido, sus historias son desgarradoras y a la larga te dan lecciones de vida, siempre se aprende algo nuevo.
Me quito la ropa,